En una elegante mansión de Somosaguas, el pasado y el presente se dan la mano en un insólito mercadillo.
La Moraleja Home, una empresa especializada en el sector inmobiliario de lujo, ha convertido esta vivienda en un bazar temporal donde se pueden encontrar verdaderas joyas a precios sorprendentes.
El evento, bautizado como «home market«, atrae a miles de visitantes que buscan desde antigüedades hasta objetos cotidianos a precios fantásticos.
La idea surgió a raiz de que muchos propietarios no sabean qué hacer con sus pertenencias al vender o alquilar sus casas. Y este sistema les ofrece una solución rápida y cómoda».
El proceso es meticuloso: el equipo inspecciona, cataloga y redecora la vivienda en unas tres semanas.
El resultado es un mercadillo que combina el encanto de lo antiguo con la emoción de la caza de gangas. Sillas por diez euros, sillones por treinta y cómodos por cincuenta conviven con piezas más exclusivas, como una mesa con sillas valorada en 15.000 euros que se vendió por 2.000.
Los pasillos de la mansión se llenan de curiosos que examinan desde juegos de sábanas hasta tetera de bronce.
En el jardín, los muebles de exterior ya lucen el cartel de «Vendido», mientras en la cocina se ofrecen tazas por treinta céntimos.
El éxito del evento es palpable. Una pareja celebra haber adquirido un bodegón de Juan Soler, mientras otro joven enumera sus compras: un atornillador eléctrico por dieciocho euros, un bolso y una esterilla de sushi por cincuenta céntimos.
A las dos de la tarde, cuando los empleados comienzan a desalojar la casa, los compradores se marchan satisfechos, prometiendo volver al próximo «home market».
La Moraleja Home ha encontrado una fórmula que beneficia tanto a vendedores como a compradores, transformando el proceso de vaciado de viviendas en una experiencia única y rentable.